Desde que terminó la llave del FC Cincinnati entre New York Red Bulls, se estaba especulando de un comportamiento incorrecto del defensor del Orange-Blue, Matt “Maton” Miazga, después del término del partido con los árbitros dentro del vestuario de estos. Había información oficial de los árbitros, pero no había nada oficial del club, salvo por ahí un periodista o comunicador que dijo que no había pasado nada, pero la pregunta es ¿Le dictaron la información del club o estuvo ahí? ¿Corroboró los hechos por ambos lados? Miles de preguntas uno se podría hacer pero la realidad es que si hubiera sido algo injusto hacia el jugador, sería ideal que el sindicato de jugadores de la MLS salga a decir algo y a la vez el club debió hacer una conferencia de prensa para aclarar.
Tanto el sindicato cómo el club se quedaron callados entonces esto deja mucho que desear, hay una frase muy conocida que dice “El que calla otorga”. La sanción es de 3 fechas hacía del defensor y lo deja sin jugar la parte más importante en la historia del FCC. Ante todo esto el jugador tiene que mejorar su carácter para saber que fuera de la alfombra verde hay modos para reclamar porque no puede ir con el mismo ímpetu cómo va a las pelotas divididas. El único perjudicado es el club por la mala imagen y deja a sus compañeros en una mala situación mientras lucha por el título. De Santo no tiene nada este jugador salvo que sea “San Matón” .